Preguntas Frecuentes

¿Cómo elegir al fotógrafo de tu boda?

Antes de nada, realiza un análisis sincero de qué tipo de reportaje quieres.
¿NATURAL? ¿POSADO? ¿ARTÍSTICO?
Después, establece el rango de precios que estás dispuesto a pagar. Analiza el mercado, y después de haber subido el rango de precios, porque por lo que te querías gastar solo te daba para un reportaje digno de salir en las noticias, llega la parte más tediosa: la criba. Aquí es imprescindible concertar una entrevista personal. Así podrás descartar pesados, artistas de la pista y vende-humos.
Una vez elegidos los candidatos que parece que saben lo que hacen es el momento de ver trabajos completos. Nunca elijas a un fotógrafo por su porfolio, sino a aquel fotógrafo que te haya mostrado VARIAS BODAS COMPLETAS, y todo lo que ves te gusta. Todos somos capaces de hacer una gran foto, pero estás buscando a alguien capaz de hacer 300 o más fotografías extraordinarias en el mismo evento.
Vale, ya has encontrado al fotógrafo perfecto. ¿Es bajito, calvo y divertido?
¡SEGURO QUE SOY YO!

¿Con cuánta antelación es conveniente contratar el servicio de fotografía de bodas?

Para estar seguros de tener fecha disponible, lo ideal es contratar al menos con un año de antelación. Si no disponéis de tanto margen, lo mejor es preguntar si la fecha aún está libre.
Hago un número limitado de bodas al año, mi filosofía es anteponer la calidad a la cantidad, por lo que una vez llegado a mi número mágico tendréis que ofrecerme un reto muy emocionante al que no pueda negarme.

¿Cuántas bodas fotografías al año?

20 es mi número mágico

y nunca realizo varios reportajes de boda en el mismo fin de semana.

¿Serás tú personalmente el fotógrafo de mi boda?

Se trata de fotografía de autor, así que SÍ, contratáis al mejor y allí estaré.

¿Ofreces reportaje de video?

Trabajo a la perfección ambas disciplinas, pero me siento mucho más fotógrafo que videógrafo.
Para aquellos reportajes en los que haya contratados ambos servicios, cuento con videógrafos colaboradores que comparten mi estilo editorial artístico y mi filosofía de trabajo.

¿Por qué dos fotógrafos en una boda?

Las bodas con muchas localizaciones reducen drásticamente la esperanza de vida del fotógrafo de bodas medio.
Si la boda se realiza un viernes por la tarde en Madrid, las posibilidades de infarto se multiplican por 4.
Para estos casos y alguno más, los fotógrafos de boda inventaron “El segundo fotógrafo”. Ser el doble de fotógrafos permite trabajar con más tiempo, reduce a la mitad el estrés y aporta mayor cantidad de fotos artísticas en un mismo reportaje de boda.
También es altamente recomendable hacer uso de “el segundo fotógrafo” cuando el número de invitados es muy alto y/o cuando se quiere un reportaje extra-espectacular.

¿Nos darás todas las fotos que haces?

Resumiendo: NO

Y nunca digas “luego me haces photoshop”
Los reportajes sin posar son un trabajo de persistencia fotográfica. Si disparo 15 fotos mientras saludas a un amigo, es probable que sólo me guste el resultado de una o dos, el resto son descartadas y eliminadas.
Las fotos que sobreviven son tratadas de una en una en un proceso llamado edición. Es a lo que el cliente coloquialmente se refiere con eso de “me harás photoshop”, frase que me gustaría que fuese erradicada de la faz de la tierra.
La selección y edición de las fotos es un trabajo minucioso y muy personal, diría que es una parte tan importante en el estilo del reportaje como el propio disparo.
Si algo no lo he considerado suficientemente bueno, ¿qué sentido tiene entregarlo? ¿Irías a un restaurante y pedirías que te sirvan las mondas de las patatas, las cáscaras de las verduras o el aceite usado de la sartén? Así que NO, no se entregan todas las fotos disparadas, se entrega únicamente la selección de las mejores y sólo tras el proceso de edición de las mismas. En una boda completa la selección cuenta con un mínimo de 500 fotos.

¿De qué se alimenta un fotógrafo de bodas?

Esta es una de mis preguntas favoritas…
Los hábitos alimenticios del fotógrafo de bodas novel suele consistir en una combinación entre ayunos intermitentes y lo que le dejan coger en el cocktail.
Con los años su dieta va evolucionando y pueden en este punto llegar a alimentarse de menús infantiles.
En la fase en que ya son profesionales experimentados, los fotógrafos de boda pueden llegar a ingerir menús completos de invitados que fallan en el último momento, o menús Staff previamente concertados entre sus clientes y el restaurante.
Mi recomendación es que no dejen que su fotógrafo desfallezca. Si quieren sacar el máximo provecho de él, pónganlo a recargar.

¿Cómo sobrevive al invierno un fotógrafo de bodas?

Los fotógrafos de bodas son personas muy inteligentes y autodidactas que estudian la macro y la microeconomía de su negocio.
Desde hace tiempo aplican una técnica económica respaldada por las universidades de Oxford, Caltech y Cambridge, denominada “fifty-fifty”. Esta técnica consiste en ingresar el 50% del importe estipulado el día de la contratación y el otro 50% con anterioridad a, o el propio día de la boda.